jueves, 9 de mayo de 2013

La Educación En El Siglo 21

La Educación En El Siglo XXI


Curtis W. Johnson, nos dice que la causa principal de la crisis no está en la falta de dinero, ni en los padres o en los estudiantes, ni siquiera en los sindicatos. “El gran error es que ha cambiado el mundo cuando la educación sigue siendo básicamente la misma”, “Estamos perdiendo la mitad de nuestros alumnos, porque están desmotivados y el colegio nada tiene que ver con el mundo real” A lo largo de su ponencia “Crisis del modelo educativo: innovación disruptiva en las aulas” precisó que la escuela, como industria, está envuelta en política, tiene pocos recursos, pero el principal problema reside en que “el modelo operativo ya no está alineado con el siglo XXI” y, a su juicio, “es casi imposible conseguir conocimientos tal y como está dispuestas las aulas hoy día”. También, indicó que los alumnos “saben que todo lo pueden buscar y encontrar en Google” y se mostró partidario de un sistema educativo dotado de “una personalización radical”, porque el modelo actual no es muy flexible. 
Estamos llegando al final del siglo XX y es tiempo de hacer un recuento de lo que hemos logrado en el campo de la educación, lo que han sido nuestras fallas y si necesitamos continuar en la misma dirección hacia el siglo XXI o hacer las cosas de manera diferente. Un niño es educado en el ambiente total en el que crece, y ese ambiente está determinado igualmente por los padres, los maestros y la sociedad que lo/la rodea. Todo esto y más determinan la calidad de individuo que produce, el cual a su vez determina la clase de sociedad en la que vivimos. La forma en que vivimos ha cambiado drásticamente durante el siglo pasado y ese cambio puede ser entendido en función a lo que hemos logrado en el cambio de la educación. Al principio del siglo XX la sociedad humana, en todo el mundo, fue acosada por tremendos problemas de desastres naturales, hambrunas, epidemias, transportación primitiva, comunicación ineficiente, carencias de cuidados para salud y una agricultura pobre. Nuestro sistema de educación nos ha ayudado a cambiar todo eso, a desarrollar todo el conocimiento y el poder que fue necesario para hacer la transición a una sociedad moderna en la que hoy vivimos. Las escuelas americanas no están exactamente congeladas en el tiempo, pero en vista de los cambios en otras áreas de la vida, nuestras escuelas públicas tienden a sentirse como echadas hacia el pasado. Los niños pasan mucho tiempo del día como sus abuelos alguna vez: sentándose en filas, escuchando a los profesores dar una conferencia, tomando notas a mano, leyendo en los libros de textos que son anticuados para el momento en que se impriman. Un bostezo separa el mundo dentro de la escuela del exterior de mundo. En los últimos cinco años, la conversación nacional sobre la educación se ha centrado en puntajes de lectura, pruebas de matemáticas y acortar la brecha entre las clases sociales.
Tradicionalmente el aprendizaje ha estado ligado a los libros, apuntes y publicaciones impresas, pero las nuevas tecnologías permiten, tanto a los estudiantes como profesores, desarrollar un nuevo tipo de enseñanza virtual que permite aprender sin una asistencia presencial ni altos costes en material. Otra herramienta cada vez más utilizada para complementar el estudio son las bibliotecas virtuales, donde se puede acceder a toda la cultura sin moverse de casa.
Las escuelas que quieren estar en la vanguardia de nuestros tiempos deberían quizá preocuparse más por algunas dimensiones del aprendizaje humano que vayan más allá de los convencionalismos escolares. Entendamos que estamos hablando de asuntos educativos que van más allá de cumplir adecuadamente con un currículo exigente, apelando a las más modernas tecnologías y técnicas pedagógicas, con un buen soporte psicológico y en el contexto de un buen clima institucional. Eso es algo básico que debe existir en toda escuela.



La Clase Del Siglo XXI



“Aula Siglo XXI” se ha consolidado como un espacio de reflexión sobre las características de las futuras aulas de enseñanza y aprendizaje, estudiando la adecuación de las mismas a las necesidades de la comunidad que se desarrolla alrededor de un centro educativo.
Respondiendo a las crecientes necesidades sociales que plantea el marco medioambiental de la enseñanza, creemos en un Enfoque Educativo para el siglo XXI que tenga muy en cuenta -entre otras concepciones pedagógicas-, las siguientes realizaciones:

1. Concepciones efectivas:


§ El aprendizaje de los estudiantes será el centro de atención.
§ El profesorado se convierte en facilitador y mediador del aprendizaje.
§ Una mejor interacción maestro-alumno y de los alumnos entre sí con la potenciación del aprendizaje cooperativo.

2. Concepciones innovadoras:

§ Integrando tecnologías de información y comunicación con enfoque pedagógico.
§ Educadores actualizándose permanentemente.
§ Innovación como componente natural y permanente en la educación. Las aulas se interconectarán con redes de comunicación multimedia.

3. Concepciones realizadoras:

§ Promotoras de valores, de convivencia y respeto a la diversidad cultural.

Las habilidades del Siglo XXI Actualmente apuntamos demasiado bajo. Capacidad en lectura y matemáticas es lo más mínimo pobre. Las habilidades científicas y técnicas son, asimismo, completamente necesarias pero escasas. La economía de hoy exige no sólo una capacidad de alto nivel en las disciplinas académicas tradicionales sino también aquellas que se pueden llamar las habilidades del siglo XXI. Estas son: 
- Saber más sobre el mundo: Los niños ahora son ciudadanos globales, incluso si son de pequeñas ciudades, y deben aprender actuar esa manera.
 - Pensar fuera de la caja: Trabajos en la nueva economía "ponen un premio enorme en las habilidades creativas e innovadoras, viendo los patrones donde la gente ve solamente caos", dice Marc Tucker, autor del informe de la comisión de habilidades y Presidente del Centro Nacional de Educación y Economía.

   
Educación y TIC  En El Siglo XXI

La educación con TIC, desde esta perspectiva, debe entenderse como algo más complejo que la mera dotación de recursos tecnológicos al aula o dar a cada estudiante un ordenador con conexión a Internet. Es una condición necesaria, pero insuficiente. Lo relevante, al menos desde un punto de vista pedagógico, es educar a los niños y niñas, a los jóvenes para la adquisición de las competencias intelectuales necesarias para interactuar tanto con la cultura existente  sea en formato libros o de red, como para recrearla de un modo crítico y emancipador. Educarles para que sepan buscar información valiosa, analizarla y compartirla. Educarles para que sepan expresarse de forma culta a través de lenguajes diversos como el textual, el audiovisual e hipertextual. Educarles, en definitiva, para que sean ciudadanos alfabetizados en las nuevas formas de cultura del tiempo digital. Sin estas alfabetizaciones para toda la población no podrá producirse un desarrollo social armonioso y democrático de la sociedad del siglo XXI.


El escenario actual se caracteriza por las transformaciones en la construcción del conocimiento y en las  formas de transferencia de estos nuevos saberes.
La incorporación de las TIC en la vida cotidiana, ya sea para uso personal, artístico, laboral o académico, ha sido paulatina, y ha ido evolucionando junto al surgimiento de nuevas plataformas y herramientas. A lo largo de este proceso, que está ocurriendo aún, las tecnologías han pasado y están pasando en el campo educativo de ser un fin a considerarse herramientas potenciadoras y facilitadoras de los procesos de enseñanza y de aprendizaje.
Un concepto clave a la hora de comprender cómo lograr la inclusión de las TIC en educación es la idea de que “es necesario aprender con y a través de las TIC”. En otras palabras: el uso de las TIC en las escuelas no debe estar reservado únicamente para actividades aisladas en los gabinetes o laboratorios de informática.
La verdadera integración de las TIC en educación requiere varias líneas a implementar:
  • Aprendizaje del manejo instrumental de la tecnología.
  • Su utilización como herramienta pedagógica para la enseñanza de los contenidos curriculares, en todas las materias y áreas en las que sea posible su uso.
  • El aprendizaje de las normas de utilización de estas nuevas tecnologías de la información y la comunicación: cuidado de la seguridad personal, respeto de la privacidad y de la propiedad intelectual, etcétera.
  • El aprendizaje de la lectura e interpretación crítica de la información y las imágenes que nos llegan a través de los nuevos formatos
  • El uso de las TIC en educación complementa a las herramientas y a las estrategias pedagógicas ya existentes y probadas.

  •         Las TIC son herramientas potenciadoras y facilitadoras de los procesos de enseñanza y de aprendizaje.
  •         No es lo mismo enseñar sobre TIC que enseñar con TIC.
  •         Los docentes deben contar con las competencias necesarias que les permitan manejar, diseñar y trazar itinerarios de usos productivos de TIC en el aula y transferir estas capacidades a los alumnos.
  •         La alfabetización en y a través de las TIC implica mucho más que incorporar computadoras en las aulas. Es, ante todo, la posibilidad de promover una actitud creativa y crítica sobre aquello que circula a través de los medios audiovisuales y digitales, y que construye el sentido de los discursos y la información.















 Habilidades de la educación en el Siglo  XXI



Una de las llamadas Habilidades del Siglo XXI la constituye el trabajo colaborativo. Esta habilidad, que implica cooperar de forma armónica para lograr un fin común, tiene a su vez una relación muy estrecha con otras que son también consideradas dentro de este nuevo currículo de habilidades: el manejo de las TIC, el dominio de una segunda lengua y la conciencia global, esta última a su vez comprende el respeto a la diversidad y la tolerancia.
 En algunas ocasiones el uso de la tecnología para impulsar el trabajo colaborativo ha logrado despertar opiniones que han dado lugar a considerar este tipo de incursiones como despersonalizaste o impersonales, sin embargo, la incorporación de recursos tecnológicos al trabajo colaborativo añade componentes que de otra forma no podrían lograrse:
1. La tecnología acorta las distancias entre los individuos, permitiendo así la cooperación entre personas sin importar, prácticamente, el lugar de la Tierra en el que se encuentren.
2. La transmisión de información de forma fácil, segura y versátil provee no sólo de diferentes formas de comunicación, sino también de instrumentos poderosos para la creación y compartición de contenidos que abonan a la, cada vez mas basta, ”Sociedad del conocimiento..
3. El uso de diferentes recursos tecnológicos que apoyan la cooperación a distancia favorece la productividad, lo cual tienen un impacto notable en el desarrollo de las sociedades y de las economías de aprendizaje.